Por muchos
golpes que tenga, aunque se le vean las marcas, los desgarros. Por muy crédulo
que sea, o inocente, o bueno; aunque no parezca sano, o guapo. Sé que no llama
la atención, no le gusta.
Yo me
lo quedo, que es el mío, que es así gracias a todo eso, y que no va a cambiar y
tampoco quiero. Y las capas eran por algo, que con nada se me queja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario