Una vez me propuse enumerar ciertos detalles de mi interés. Hubo quien creía que no llegaría a la cantidad requerida, pero ya el primer día supe que me quedaría corto. Se me quedaron muchos en el tintero, pero el tiempo que pasé con los que sí salieron a la luz no consiguieron otra cosa que recordar lo fácil que es querer según a quien. Que pasar lista a los rincones de un mapa del tesoro da ganas de volver a buscarlo. Que parafraseando a sabina, enumerar es enamorar con dos letras cambiadas.
Sé que no tengo todo lo que quiero, pero retengo el placer de cuidar lo que puedo, de estar cerca de quien me quiere, de reír con quien me motiva, pintar con quien me inspira, hablar con quien me profundiza y de no fallar a quien me apoya.
jueves, mayo 09, 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario