Ojalá
yo también tenga un poco más de suerte, aunque no niego que tuve mi montaña de
ella contigo, y aparezca por arte de magia un tren que no salga de la estación
para recorrer unos kilómetros que no quiero poner de por medio.
Esa
suerte no la pido para ti sino para mi, porque quizás no soy tan blanco y tengo
mis motivaciones egoístas, incluso en lo que me motiva a apoyarte, a
escucharte, a cuidarte.
Porque
sí, te apoyo, y siempre lo haré. Me tienes cerca, y sin cerca. Pero que sepas
que sin ninguna duda una de las razones que hacen que esté ahí, no es sólo que
quiera estar. Es que yo también necesito tu brillo cerca, y tu apoyo, tu magia y
tu ser como es conmigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario